Se podrán decir miles de cosas sobre Conor McGregor. Tendrá fanáticos que lo defiendan a muerte, como detractores que critiquen todo lo que hace. Lo que es incuestionable es que el irlandés es una persona motivada que consigue lo que quiere a toda costa.
Conor alcanzó el éxito deportivo conquistando títulos y rompiendo récords millonarios. Ahora cosecha éxitos vendiendo millones de botellas de whiskey. McGregor nunca dejará de ser arrogante y presuntuoso, pero ha conseguido construir un imperio de la nada. Y eso, es una lección de vida para cualquiera, aunque a muchos no le gusten las formas, ni sus actitudes, o sus decisiones.
Celebrando que las ventas de Proper Twelve alcanzaron 1 billón de dólares, el irlandés se regodeó en el éxito de su whiskey. Aprovechó también para adjudicarse crédito por elevar el valor de marca de UFC .
Was there ever any doubt I’d turn Whiskey to a Billi?
I turned “human cock fighting” to 4.2.
I’m gonna toast on this fine Thursday this amazing news.
Sláinte to the only true Irish Whiskey we have left, @ProperWhiskey!
Irish owned forever.
Thank you all.
It has been my pleasure. https://t.co/E9RGpRxAC5— Conor McGregor (@TheNotoriousMMA) April 25, 2019
“Alguna vez hubo alguna duda que haría billonario al whikey? Convertí a “las peleas de gallos humanos” en un negocio de 4.2 Voy a brindar este agradable jueves por esa increíble noticia.”
Más allá de si nos agrada o no, la historia de vida de Conor McGregor podría servir de inspiración para muchos. El propio irlandés compartió una anécdota sobre sus humildes comienzos, digna de reflexionar.
“Dato divertido para todos ustedes. Antes de que me ganara la vida peleando y con el whiskey, fui entrenador de “boxercise” en mi gimnasio local, SBG. Cobraba €10 por clase, y €5 de esos eran para el gimnasio.
Eso fue justo antes de mi debut en UFC. Había renunciado a todo para hacer realidad mi sueño y no tenía dos centavos para frotar el uno con el otro. Estas clases literalmente me conseguían mi paquete de filetes de pollo y brócoli de Tesco para que pudiera comer en la semana. Los carbohidratos eran el enemigo en aquel entonces, y también eran caros, así que los ignoraba felizmente, lol.
Adelantemos el tiempo hasta hoy y ¡hemos alcanzado 1 billón de dólares en ventas anuales por primera vez en la larga y condecorada historia del whiskey!
¡Qué viaje tan maravilloso! ¡Agradezco a mis estrellas de la suerte, mi ética de trabajo, y más importante a mis fieles fanáticos por todo esto! ¡Muchas gracias a todos! ¡Sigan empujando todos, el trabajo duro paga y los sueños se hacen realidad!”