La mala sangre entre Luke Rockhold y Michael Bisping es una de las pocas rivalidades genuinas que prevalecen en UFC. Con un par de espectaculares nocauts (uno por bando), sin duda alguna valdría la pena ver a estos dos guerreros completar la trilogía.
Bisping está pensando en el retiro, pero quiere al menos un último viaje al octágono antes de colgar los guantes. Por su parte, Rockhold viene de sufrir un terrible KO ante Yoel Romero y parece haberse despedido del sueño de ser campeón de peso medio otra vez. La trilogía tendría mucho sentido económicamente para ambos en un momento que ninguno aspira al título.
En días recientes Bisping abrió la puerta a una posible pelea ante Luke Rockhold. Esta semana, en una entrevista para The MMA Hour, Luke afirmó que ninguna pelea le interesaría más que enfrentar a Bisping una vez más.
“Si esa pelea está sobre la mesa, tendría que ponerla hasta arriba de mi lista antes de pensar en cualquier otra cosa. Si él puede respaldar lo que dijo, estaré muy interesado en tomar esa pelea en donde sea y cuando sea.”
Luke aprovechó para proponer una fecha, el 7 de julio en la cartelera que cierra International Fight Week en Las Vegas. De igual forma, propuso que la pelea fuera en 205 libras para que nadie sufra con el corte de peso.
“Es algo que me emociona. ¿Por qué no lo hacemos con estilo? Firmemos el contrato… Yo sé que esta es una pelea que UFC está buscando hacer. Así que ya veremos si Bisping puede respaldar a su boca otra vez.”
Si esperáramos que Bisping se quedara callado, estaríamos cometiendo un error. Este martes el británico habló para MMAFighting.com y descartó los comentarios de Rockhold respecto a una trilogía.
“Puedo categóricamente asegurar que no se me ha ofrecido una pelea con Luke Rockhold el 7 de julio. Él no debería estar tan ansioso de volver a ser noqueado. Que se quede en el modelaje. Juzgando por sus últimas tres peleas, las MMA ya no parecen ser lo suyo.”
