Jones Corey

Hace algunas semanas Jon Jones anunció haber elegido a Dominick Reyes como el rival para su siguiente defensa.

Como era de esperarse, Corey Anderson, el otro potencial candidato, expresó su descontento con la decisión. Corey señaló que vencer a Johnny Walker tenía más mérito que la victoria de Reyes sobre Chris Weidman. Según Anderson, la oportunidad debió de haber sido suya y Jon Jones está poniendo excusas para no enfrentarlo.



Justo cuando parecía que Jones no iba a responder a las palabras de Anderson, llegó lo que todos esperábamos. En su momento Jon explicó porqué era Reyes el oponente más peligroso. Sin embargo no tuvo problemas en explicarle de otra forma a Corey. Ya lo dice el dicho, una imagen vale mil palabras. Aún así Jones agregó unas cuantas palabras, por si las dudas.

“OSP noquea a Anderson pero es dominado por Dominick. ¿Podemos decir con seguridad que escogí el enfrentamiento más difícil posible en las 205 libras?”

Un razonamiento así de contundente deja poco lugar a las dudas. Aunque en repetidas ocasiones se ha dicho que las “matemáticas de las peleas” no tienen validez. No porque un peleador haya perdido con el oponente en común de otro, significa que sea peor. Por lo pronto la decisión está tomada y Corey Anderson tendrá que esperar su oportunidad para disputar el cinturón.

Probablemente la espera no sea larga, pues si Jon resulta victorioso, Corey debería ser el próximo. Pero si Reyes sorprendiera al mundo y destronara a Jones, indudablemente habría una revancha inmediata. Mientras todo ese panorama se aclara, seguramente Corey Anderson no le volverá a pedir explicaciones a Jon Jones.

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