Chael Sonnen cree que una revancha inmediata entre Alex Pereira y Magomed Ankalaev no es una buena idea.
Pereira (12-3 MMA, 9-2 UFC) perdió su título de peso semipesado ante Ankalaev (21-1-1 MMA, 12-1-1 UFC) por decisión unánime en el evento principal de UFC 313 a principios de este mes en el T-Mobile Arena de Las Vegas.
Todo apunta a que Pereira tendrá la oportunidad de vengar su derrota contra Ankalaev en su próxima pelea, pero Sonnen le advierte que esa opción no le conviene. “Poatan” logró defender los 12 intentos de derribo de Ankalaev, pero fue superado en los intercambios y controlado durante la pelea.
Chael Sonnen cree que una revancha tendría el mismo desenlace.
“Soy un gran fan de Alex Pereira, tanto a nivel personal como por su desempeño dentro de la jaula. Pero tengo que decir que no hubo nada en esa primera pelea – ya sea por enfermedad, lesión o una combinación de ambas – que haga pensar a un analista razonable que el resultado sería diferente en una segunda pelea. Esa primera pelea fue 4-1. Fueron cuatro rounds contra uno. Realmente no fue una pelea muy competitiva. Pereira hizo algunas cosas muy bien, como defender los derribos, algo que no sabíamos que podía hacer. Pero fue un ritmo bastante lento y no pasó mucho en la pelea”.
“Solo digo que no vimos nada que nos haga pensar que los siguientes cinco rounds serían diferentes. Si Pereira supuestamente aprendió algo de esta pelea, ¿por qué no pensar que Ankalaev también? Ankalaev fue quien no logró completar los derribos. Así que, en teoría, él es quien habría sentido y entendido qué ajustes necesita hacer para derribar al tipo grande. Y una vez que lo logre, no veo cómo los jueces no lo favorecerían”.
Chael Sonnen señala que la historia ha demostrado que Pereira aún podría obtener grandes oportunidades después de una derrota, ¿pero después de dos?
“Es una sorpresa y creo que es un riesgo”, dijo Chael Sonnen. “La forma en que Pereira llegó a la división de 205 libras no es como la gente la recuerda. La mayoría cree que llegó a las 205 libras porque limpió la división de 185, pero eso no es cierto. Él perdió. Cuando perdió en las 185 libras y ya no tenía el cinturón, dejó de estar atado a esa división y quedó libre para ir a donde quisiera. Si queríamos llevarlo a peso pesado, no era venciendo a Ankalaev y dominando las 205 libras”.
“La forma de hacerlo habría sido perdiendo, y eso ya sucedió. Nuestra oportunidad de subirlo para enfrentar al ganador de (Jon) Jones vs. (Tom) Aspinall, o cualquier otro escenario, ya estaba ahí, y no estoy seguro de que hayamos aprovechado la oportunidad al máximo. La pelea fue cerrada. Defendió los derribos. Todo esto sumó a la historia. Déjenlo ir. No hubo nada vergonzoso en esa derrota. Pero si acepta la revancha y pierde dos veces seguidas, especialmente de manera dominante, ahí es cuando la vergüenza comienza a aparecer”.
