Jorge Masvidal entra a la recta final de su preparación para enfrentar a su ex amigo Colby Covington. ‘Gamebred’ no oculta sus malas intenciones y admite su deseo de lastimar severamente a ‘Chaos.’
La promoción de la pelea se ha centrado en la narrativa de los mejores amigos que se convirtieron en rivales. Sin embargo Masvidal asegura que ese no es necesariamente el caso.
“Hay muchas entrevistas de él llamándome su mejor amigo. Yo realmente no hacía eso, porque veía señales. La forma en la que trata a su familia, la forma en la que habla de su hermana. La forma en la que habla de su mamá. Hay tres versiones de cada historia. La tuya, la suya, y la verdad. Así que yo pensaba, ‘este tipo es interesante.’”
Por si eso fuera poco, Jorge recordó todos los comentarios negativos de Colby sobre tipos como Jon Jones y Tyron Woodley.
“Hubo numerosas, numerosas situaciones en las que siempre habló mal de Jon Jones. De Woodley, yo estuve ahí para todo eso. Lo de Jon Jones, yo no estuve ahí con ellos en la universidad. Pero estuve para todo lo de Woodley. Woodley se lo llevó con él. Le estaba dando como mil dólares por semana, alguna locura como esa. Cuando este tipo era un amateur, solo por entrenar con él por 4 semanas. Patrocinadores, comida, y luego regresó hablando mierd* de Woodley. Si este tipo va por ahí hablando así de todo el mundo, ese simplemente es quién él es, ¿sabes? No hay nadie a quien él respete, en lo absoluto.”
La gota que derramó el vaso, o según Masvidal, que aceleró el proceso, fue cuando Colby incumplió una promesa con Paulino Hernandez, uno de los entrenadores de Jorge.
“Yo ya pensaba, ‘déjenme empezar a separarme de este tipo poco a poco.’ Y luego ¡Bam! Antes de que yo pudiera hacerlo del todo, él traicionó a mi entrenador. No le pagó el dinero que se había acordado y lo supe desde entonces, yo voy a lastimar a este tipo.”
Finalmente, Masvidal comparte su predicción sobre lo que sucederá en el octágono el 5 de marzo.
“Colby estará en estado crítico el lunes. Y será grave. Va a tener un par de fracturas orbitales, un par de fracturas por aquí y por allá. Quiero cambiarle la vida de una manera muy drástica. Y espero que de camino a quitarme, el referee se resbale con una cáscara de plátano y yo pueda darle algunos golpes extra y realmente cambiarle la vida y la estructura facial.”