Ícono del sitio Diario MMA – MMA en tu idioma

Patricio ‘Pitbull’ habla sobre su altercado con A.J. McKee previo a Bellator 263

Pitbull Freire AJ McKee

Parece seguro decir que la familia McKee se metió bajo la piel de Patricio Pitbull.

El jueves, en la conferencia de prensa previa a la pelea de Bellator 263, las cosas iban bien hasta que estalló una discusión sobre lo que se consideraba y no se consideraba “irrespetuoso”. El incidente culminó cuando los dos peleadores tuvieron que estar separados físicamente y Pitbull salió furioso. Hablando con MMAJunkie después, Pitbull explicó lo que sucedió.



“Las cosas fallaron cuando empezó a hablar mierd* sobre respeto. Todo el mundo sabe que su padre le decía a los medios que yo me dopaba. Después dijo que me golpearía frente a mi familia. Haré que les muestre algo de respeto. El último que habló mierd* así, le pateé el trasero en menos de un minuto. Ahora, él se merece lo mismo”.

El padre de McKee, Antonio McKee, es un consumado peleador de MMA por derecho propio y se desempeña como entrenador en jefe de su hijo. En una entrevista con Showtime Sports el mes pasado, el señor McKee mencionó el tema del uso de drogas que mejoran el rendimiento en Bellator. Aunque no llegó a acusar directamente a Pitbull, dejó la sugerencia ahí.

“Lo único que realmente nos preocupa es asegurarnos de que la USADA intervenga y se asegure de que estos peleadores hagan pruebas de detección de drogas. Soy un hombre de 51 años y si me ves, estoy musculoso. Todo esto es un trabajo duro natural, pero mantener ese músculo genéticamente, es mucho más difícil para los demás que para las personas de color. Genéticamente es un poco diferente. Así que estoy deseando que la USADA se asegure de hacer esas buenas pruebas y todo sea genial porque vamos a pasar todas las pruebas”.

Esos comentarios parecen haber tocado la fibra sensible de Pitbull. El campeón de dos divisiones de Bellator nunca ha fallado en una prueba de drogas en su carrera y, en ocasiones, ha sido inflexible al solicitar pruebas más estrictas para sus peleas. Esa acusación, junto con los comentarios sobre su familia, es lo que enfureció a Pitbull.

“No lo sé, tiene 60 años. Él es más fuerte que yo, ¿así que también está drogado? ¿Quizás? No sé lo que quiere. Tengo 34. Carajo, hombre. No tengo 60 o 40. Soy un competidor y todavía un poco gordo. Carajo, hombre. Tiene miedo de lo que suceda. Voy a patearle el trasero”.

Pitbull tendrá la oportunidad de silenciar a la familia McKee mañana en The Forum en Los Ángeles, California.

Salir de la versión móvil