Oficialmente, Khabib Nurmagomedov está retirado. El ruso lo anunció al término de UFC 254 y esa es la versión oficial. Sin embargo Dana White se niega a aceptarlo e intenta convencer al ruso de volver a competir.
Es por ello que hace unos días Dana se reunió con Khabib para pedirle que reconsidere su postura. Los únicos que saben qué se dijo en esa reunión son White y Nurmagomedov. El único que ha hablado sobre el tema es el presidente de UFC. White afirmó el fin de semana pasado que había logrado que el campeón ruso aceptara evaluar su decisión después de las peleas de este 23 de enero en UFC 257.
Según White, Khabib habría dicho que si alguno de los cuatro peleadores en la estelar y co estelar del evento hacía algo espectacular, analizaría la posibilidad de volver. De no ser así, le confirmaría su retiro a Dana. Esa narrativa queda mal parada tras las declaraciones que Khabib diera este miércoles en una entrevista para Sport24.
“He logrado casi todo en este deporte y no hay nadie a quien me gustaría enfrentar ahora. Mucha gente no quiere entender mi perspectiva. Yo no veo eso todavía. Yo entreno para mí. Si hablamos de todos mis proyectos de negocios que tengo planeados, pelear no está en esos planes.”
Nurmagomedov se retiró en octubre luego de someter a Justin Gaethje en UFC 254. El 2020 fue un año muy duro para Khabib quien además de lesiones, sufrió la muerte de su padre. Con un récord profesional de 29-0, el ruso prometió a su madre que no volvería a pelear, y parece tener intención de cumplirlo.
“Mi madre es la cosa más preciada que me queda. No me van a empujar a hacer cosas que van a decepcionar a mi madre. Ni siquiera tengo planes para UFC en el futuro cercano. No tengo ningún pensamiento sobre prepararme para una pelea. Vi cómo se estaba preparando Umar ahora y pensé, Alhamdulillah (alabado sea Dios) que dejé eso atrás.”