Joseph Benavidez sufrió una devastadora derrota por KO a manos de Deiveson Figueiredo en UFC Norfolk.
La derrota marcó la cuarta ocasión que Benavidez cae en una pelea de campeonato. Joseph perdió una vez ante Dominick Cruz por el título gallo de la extinta WEC. Años después cayó en par de ocasiones ante Demetrious Johnson buscando el título mosca de UFC. El 29 de febrero en UFC Norfolk, Benavidez perdió su cuarta pelea de campeonato. Tal vez ante Figueiredo haya tenido su última oportunidad para ser campeón.
Si a todo eso le sumamos que el brasileño no dio el peso, sin duda es un momento difícil para Benavidez. Tanto en la entrevista en el octágono, como en palabras posteriores a la velada, se percibe el dolor de Joseph.
“Siento que esto ahora mismo no es real, que estoy en una maldita pesadilla. Tuve muchas visiones de hablar contigo después de la pelea y de muchas otras cosas que iban a pasar y no sucedieron. Mierd4, hombre, todo el mundo atraviesa momentos buenos y momentos malos en todos lados. Este es el mío, para que todos lo vean. Supongo que soy afortunado de estar vivo, pero me partí el trasero trabajando por eso y no salió grandioso. Pero gracias a todos por venir.”
Joseph Benavidez llegaba a este combate como el favorito en las apuestas, además de en la simpatía de la afición. Luego del fracaso de Figueiredo ante la báscula, el mundo de las MMA se volcó en favor del veterano.
Para hacer la historia aún más complicada, justo antes de ser noqueado hubo un accidental choque de cabezas. Benavidez sacó la peor parte y una enorme cortada apareció en su frente, sangrando profusamente. Desconcentrado por el suceso, Joseph se limpiaba la sangre cuando entró el derechazo que acabó con la contienda.
El domingo por la mañana, Benavidez compartió una publicación en su cuenta de Instagram citando letras de la canción “Elevators” de Outkast.
“Venimos desde muy lejos, como esos cigarillos delgados. Desde Virginia, esto no se va a detener, nosotros vamos a continuar.”
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