Conor McGregor se prepara para un 2020 en el que intentará volver a la cima. Sin embargo tuvo un 2019 bastante complicado con situaciones fuera del octágono. Muchos llegaron a compararlo con el descarrilamiento que sufrió Mike Tyson en los 90s.
Mike Tyson estuvo en prisión durante tres años tras ser declarado culpable de violación. Actualmente McGregor está siendo investigado por dos acusaciones de agresión sexual. Conor ha asegurado que las acusaciones en su contra son infundadas.
McGregor admite que tal vez su carrera estaba tomando un camino parecido a la de Mike Tyson. Sin embargo asegura haber dejado todo eso atrás y se declara una mejor versión de sí mismo.
“Ahora, aquí está la cosa: Definitivamente Mike Tyson ha tenido sus altas y bajas, y su administración del dinero lo ha llevado a estar en una posición en la que no debería haber estado. Pero si ven a Mike ahora, él tiene su dinero, tiene su negocio con la hierba, le va bien. Pero sí, yo no quiero ir por ese camino. No quería ir por ese camino y quizás estaba empezando a ir por ahí un poco. Ahora me estoy escuchando a mí mismo, a la gente cercana a mí que respeto, y haciendo enmiendas.”
Conor reitera que las malas decisiones han quedado en el pasado. McGregor dice haber recuperado el rumbo y haber salido de la oscuridad como un hombre nuevo.
“Sé lo que necesito hacer. Sabía lo que tenía que hacer y lo que no debería haber estado haciendo. Simplemente me escuché a mí mismo y seguí mis órdenes. Eso me ha hecho un mejor individuo y un mejor hombre. Estoy en un mucho mejor lugar.”
Por último, el irlandés abordó un tema que se ha rumorado en repetidas ocasiones. Tal como sucede con muchas otras figuras del deporte, con el dinero todo se transforma. El entorno se contamina y a veces nadie cuestiona a la figura, con tal de no contrariarlo y seguir viendo beneficios. McGregor niega airadamente que ese sea su caso.
“Oh, eso son patrañas. He oído la forma en la que tratan de torcer esa narrativa. La gente en mi equipo son verdaderos maestros de la táctica, en todos los campos. Simplemente dejé de ponerle atención a todo eso. Confíen cuando les digo que no tengo gente así conmigo. Todos estamos juntos en esto.”
