Este sábado se llevará acabo UFC 243 desde Melbourne, Australia. La pelea estelar es para definir al campeón de las 185 libras entre Robert Whittaker e Israel Adesanya. Ambos peleadores ostentan un cinturón de campeón.
Robert Whittaker es campeón desde julio del 2017 tras vencer a Yoel Romero. El título ganado por Whittaker era interino ya que el campeón indiscutido en ese tiempo era Michael Bisping. El británico decidió defender su cinturón en contra de Georges St-Pierre en UFC 217, ya que representaba una pelea mucho más lucrativa para él. La historia es de todos conocida, GSP ganó el título y un mes después renunció a él. El canadiense no quiso defenderlo ni una sola vez, argumentando problemas físicos debido a exponer a su cuerpo a subir de peso. Después de esa decisión por parte de GSP, Robert Whittaker se convirtió en campeón indiscutido de UFC.
Desafortunadamente para Whittaker no ha podido estar tan activo como él quisiera. Desde que ostenta el título de campeón sólo ha podido defender el cinturón en una ocasión. Y la pelea ante Adesanya será su segunda defensa del cinturón de manera oficial.
Por su parte Israel Adesanya llegó a UFC para convertirse en una super estrella. Israel debutó en el octágono el 11 de febrero del 2018. En su debut derrotó a Rob Wilkinson a través de un TKO en el segundo round.
Desde su llegada, Adesanya ha superado a cada peleador que le han puesto en frente. Tiene un récord en UFC de 6-0. Las victorias más notables de ‘Stylebender’ son ante Anderson ‘Spider’ Silva, Kelvin Gastelum y Derek Brunson.
Recordemos que Whittaker iba a enfrentar a Kelvin Gastelum en UFC 234. Pero, las complicaciones de salud por parte del campeón lo forzaron a abandonar la batalla. UFC no se durmió en sus laureles y aprovechó la popularidad de Israel Adesanya para programar un título interino para UFC 236 el pasado mes de abril.
Israel se vio forzado a llegar a la distancia ante un durísimo Kelvin Gastelum en UFC 236. Ambos peleadores entregaron una de las peleas más brillantes del año. Pusieron a prueba sus cuerpos y la determinación interna para ganar.
Esperamos que la pelea entre Whittaker y Adesanya sea una verdadera guerra que podamos recordar en el futuro como una de las mejores en la historia. Todos los elementos que se necesitan para una pelea espectacular están puestos. Ahora es sólo cuestión de que los peleadores cumplan con las expectativas que tenemos.