El octágono de UFC regresa a México en este nuestro mes patrio. El sábado 21, siete talentosos peleadores defenderán la Arena Ciudad de México como feroces guerreros aztecas.
Motivados por el apoyo incondicional del público que se de cita en la arena, nuestros valerosos guerreros saldrán a dejarlo todo en la jaula. El objetivo es claro, defender a toda costa aquello que tantos sacrificios les ha costado conseguir.
En el imperio azteca la vida de un guerrero era a menudo corta. La esperanza de vida apenas alcanzaba a rondar los 37 años. Lo mismo sucede con la carrera de un peleador profesional de artes marciales mixtas. Los guerreros aztecas llevaban Ichcahuipilli, una armadura de algodón acolchado. Nuestros guerreros modernos llevan como única armadura su talento y fortaleza mental. Sin un chaleco que pueda hacer frente a espadas de obsidiana y flechas, estos valientes peleadores cuentan únicamente con su habilidad y velocidad para esquivar los ataques enemigos.
Liderados por Yair ‘El Pantera’ Rodríguez, como el tlatoani conquistador con más recorrido dentro de UFC. Con un récord de 7-1 y seis bonos dentro de UFC, Yair es el más experimentado de los siete.
En la siguiente línea podríamos poner a Polo Reyes y ‘Teco’ Quiñonez como los cihuacoatl. Polo entrará a su octava pelea dentro de UFC con un récord de 4-3 y habiendo sumado tres bonos. Mientras que ‘Teco’ intentará regresar a la senda del triunfo tras ver truncada una racha de cuatro victorias en fila.
Por su parte las guerreras del occidente, la culichi Irene Aldana y la tapatía Alexa Grasso buscarán a toda costa una victoria que las acerque al top 5 de sus respectivas divisiones.
Finalmente Brandon Moreno y Martín Bravo tendrán que emular a los guerreros cuauhpilli y demostrar ese temple inquebrantable que les permita demostrar que pertenecen a la élite de UFC.
La mesa está puesta para los siete guerreros aztecas, ante el cobijo de su gente.
