Mientras T.J. Dillashaw sigue escondido en las sombras y en total silencio, siguen las especulaciones sobre su caso.
Hace unos días T.J. anunció que dejaría vacante el título gallo de UFC tras un “hallazgo adverso” de USADA. T.J. no admitió ninguna culpa, pero tampoco se dijo inocente, y eso dice mucho por sí solo. Muchos atletas han afirmado que eso habla muy mal de Dillashaw e indicaría que consumía sustancias prohibidas. El más reciente en dar su opinión fue Michael Bisping.
“Yo no rompo el círculo de confianza, pero sí les diré una cosa. Nadie deja vacante un título por respeto a la división. No se trata del resto de la división, se trata de mí, el campeón. No voy a renunciar al título luego de haber destruido a la competencia y proclamarme campeón. Uno simplemente no haría eso. Eso -y me disculpo si me equivoco- es casi como admitir la culpa.”
“Uno no renunciaría al cinturón a menos que tuviera alguna culpa y supiera que no podría salir bien librado del tema.”
El que Dillashaw fuera el primero en hacer público el tema y renunciara al cinturón fue totalmente inesperado. Desde hace unos meses USADA no revela ninguna información hasta que sera 100% segura. De ser inocente, Dillashaw podría haber resuelto el tema con USADA sin que nadie supiera nada.
Ahora la sombra de la duda siempre quedará junto a su nombre y sus logros. Además de la culpa de poder haber lastimado a compañeros de profesión. Algo que Bisping experimentó en carne propia.
“Al hacer trampa en este deporte el peligro es muy, muy real. Yo sigo teniendo las lesiones hasta el día de hoy. No voy a entrar en detalle, pero las tengo por pelear con gente que consumía esteroides y hacía trampa. Se supone que debe haber honor y un cierto código moral cuando peleas.”