Max Holloway perdió una oportunidad de enfrentar a Khabib Nurmagomedov el año pasado y no piensa permitir que eso le pase de nuevo. El hawaiano subirá a peso ligero en abril para enfrentar una revancha con Dustin Poirier. La victoria le garantizaría un duelo con el campeón de peso ligero.
El combate será por el título interino de las 155 libras mientras Khabib se mantiene al margen en solidaridad con sus compañeros suspendidos por más tiempo por el incidente en UFC 229. Holloway asegura no haber dudado ni un momento cuando le ofrecieron la pelea con Poirier.
“Khabib dijo que quería pelear conmigo, pero quería que yo me probara en la división. Decidí probarme con Dustin Poirier el 13 de abril. Saldré a ponerme a prueba y cuando Khabib esté listo para regresar, yo también lo estaré.”
Además, la cereza en el pastel para Holloway es poder vengar su primera derrota como profesional. Dustin Poirier fue el encargado de darle la bienvenida a Max a UFC y le quitó el invicto. En aquel lejeano febrero de 2012 en UFC 143, Poirier sometió a Holloway en el primer round.
Max tuvo un complicado inicio de 2018 donde tuvo que renunciar a un par de peleas. Holloway está planeando compensarlo con un movido 2019. Su intención es defender el título pluma después de vencer a Poirier. Finalmente cerrar el año unificando el título de peso ligero ante Khabib Nurmagomedov.
“Tras la pelea con Ortega necesitaba atender cuestiones personales, luego me llegaron con esta pelea para abril. Hay cosas que no puedes dejar escapar entre tus dedos. Primero lo primero, tengo que enfrentar a Dustin Poirier y después hablaré con UFC. No creo que Frankie Edgar y Jose Aldo se merezcan un campeón que pase un año sin defender. Después de esta puedo bajar a pluma en el verano, eso sería divertido. Pero primero lo primero, el 13 de abril.”
