Mucho antes de que Eddie Alvarez se estableciera como uno de los mejores peleadores del mundo, solía trabajar largas horas vaciando concreto.
Cuando finalmente tuvo la oportunidad de convertirse en peleador de tiempo completo, asumió que su vida sería mucho más fácil, que se habían acabado los largos días de trabajo físico. Bueno, pues resulta que Eddie estaba equivocado.
Alvarez habló al respecto en su página de Instagram el pasado jueves. Eddie explicó su transición del mundo del concreto al mundo de las peleas. Si bien su trabajo no se volvió más fácil, si lo hizo mucho más feliz.
“Levántense y muévanse, Dios es bueno, otro día para pelear. Mi primera meta en este deporte era ganar suficiente dinero peleando para poder renunciar a mi trabajo en concreto y poder pasar todo mi día preparándome para mis oponentes. El concreto era levantarme a las 5-6 am, el concreto era una constante tortura física. Todos los días alguien me decía qué hacer. El concreto era puro sufrimiento. A los 23 años conseguí un contrato de $30,000 por pelea con Bodog, en ese momento solo ganaba $45,000 al año en concreto.
Recuerdo como si fuera ayer haber subido corriendo a decirle a Jamie. Mi primer día como peleador de tiempo completo me levanté a las 6 am. Para el entrenamiento de las 7 am mi corazón ya latía a 180, estaba adolorido y para empeorar todo, había alguien gritándome diciéndome que hacer.🤣🤣🤣 En ese momento me di cuenta que había cambiado un sufrimiento por otro. La única diferencia era que ¡me encantaba!
Los reto a dedicar toda su vida a algo que amen, sin certidumbre, prueben su fe, y arriésguenlo todo. Son más poderosos de lo que creen ser, todos lo somos. Hagan lo que aman a cualquier costo, y lo más importante, que se joda el concreto.”
Eddie Alvarez sigue viviendo su sueño y busca agregar un nuevo cinturón a su colección. Su debut en ONE Championship será el 31 de marzo en los cuartos de final del Grand Prix de peso ligero. El combate se realizará en Tokio, Japón, y su rival será Timofey Nastyukin.
