Khabib Nurmagomedov no siente tener la culpa por lo sucedido al final de UFC 229. Sin embargo ofreció disculpas por su comportamiento, aunque justificó sus acciones y responsabilizó a McGregor y a los medios.
“Quiero ofrecerle una disculpa a la Comisión Atlética, también a Las Vegas. Sé que no mostré mi mejor cara, esta no es mi mejor cara, pero soy humano,” dijo el ruso admitiendo su culpa.
Aunque se haya disculpado, Khabib piensa que lo sucedido simplemente es consecuencia del comportamiento de McGregor desde Brooklyn.
“No entiendo cómo la gente puede hablar de que ‘me salté la jaula.’ Que se preocupen porque él habló de mi religión, de mi país, de mi padre. Él fue a Brooklyn y rompió el autobús, casi mata a dos personas. Preocúpense por eso, preocupénse por esa mi***a. ¿Por qué la gente habla de que me salté la jaula? No lo entiendo.”
Nurmagomedov seguía molesto por los comentarios de McGregor previo a la pelea. Khabib no culpa únicamente al irlandés, también criticó a los medios.
“Quiero decir algo, saben, la gente un poco, no la gente, creo que los medios, los medios cambiaron las MMA. Este es un deporte de respeto. Este no es un deporte de hablar basura. Se los dije antes, quiero cambiar este deporte. No quiero que la gente hable mi***a de sus oponentes, ni de sus padres ni de su religión. No se puede hablar de la religión ni de la nación, no se puede hablar de eso. Para mí, eso es muy importante.”
Khabib no aceptó preguntas y tras su mensaje respecto a lo ocurrido, justificó su carácter. El campeón apeló a sus antecedentes y a la gente que lo conoce para dejar claro que no es así normalmente.
“Mi padre me enseñó que siempre hay que ser respetuoso. Todo mi equipo de siete años en California sabe quién soy. Todos mis amigos, todos los que me conocen, saben quién soy. Se los dije, no solo Conor, todo su equipo son máquinas de rendirse. Cuando lo pones mal se rinde. ¿Qué pasó hoy? Le decían el dos veces campeón en dos divisiones. Pero hoy se rindió y por eso tengo aquí el cinturón. Campeón de peso ligero de UFC, indiscutido e invicto.”