Lo que debió ser el momento más brillante en la carrera de Khabib Nurmagomedov, terminó de manera lamentable. Luego de vencer con pasmosa facilidad a Conor McGregor, ‘The Eagle’ arruinó su momento de manera vergonzosa.
En lugar de celebrar y esperar la entrevista más importante y vista de su carrera, el ruso optó por lanzarse sobre la malla y atacar a Dillon Danis, compañero de equipo y entrenador de lucha de McGregor. Lo siguiente fue un terriblemente lamentable caos, jalones y empujones por todos lados. Mientras tanto, un todavía exhausto Conor McGregor permanecía derrotado en el octágono.
El irlandés no tuvo la energía ni el deseo de involucrarse o defender a su equipo. Esta vez no tuvo diablito ni amenazas de muerte que lanzar. En cambio fue víctima de un cobarde ataque por la espalda. Alguien del equipo de Khabib aprovechó el momento para brincar sobre la malla y entrar al octágono. De inmediato se fue sobre McGregor y ante la mirada impávida de los empleados de seguridad, conectó un derechazo a la cabeza del irlandés.
Durante varios segundos parecía que las cosas estaban a punto de estallar. Sin embargo, y afortunadamente, McGregor y su gente no tuvieron respuesta al ataque. Parece que la palabrería del irlandés no fue tomada como juego por los rusos. Recordemos que apenas el jueves McGregor amenazaba a Khabib y a su equipo al tiempo que afirmaba que deberían andar con cuidado siempre, en donde fuera.
“Nunca habrá paz. Esto nunca, jamás se va a acabar. Si no puedes apuntar a la paz, apunta entre los ojos.”
Esas fueron las palabras de McGregor. De acuerdo, ninguna palabra justifica la lamentable actitud del ruso y su equipo. Pero también es indiscutible que las palabras, además del ataque de McGregor al autobús en abril, encendieron una llama que desafortunadamente no se apagó cuando Conor se rindió ante Khabib.