Carlos Condit fue muy claro en sus declaraciones tras haber sido derrotado por Demian Maia en agosto del 2016. La derrota fue tan apabullante que lo hizo cuestionar sus habilidades y contemplar el retiro. “No sé si todavía pertenezco aquí,” fueron las palabras del ‘Natural Born Killer’ y tras más de un año fuera, parecía que ya había seguido adelante con su vida y estaba enfocado en su negocio .
Condit le pidió a UFC que le consiguiera una pelea para diciembre y en cuestión de días se anunció que enfrentaría a Neil Magny en UFC 219. En la más reciente edición de The MMA Hour, Condit habló sobre lo que pasó por su mente tras ser vencido por Maia.
“Soy un peleador, esto es lo que amo hacer. Obviamente hay muchos factores que influyen la toma de decisiones. Por muy importantes que sean las cosas que estoy haciendo con mi vida y con mi carrera, creo que siempre quise volver a pelear, quizás quiera pelear hasta el día en que me muera.”
Lo que más molestó a Condit de la derrota con Maia fue no haberse visto como el peleador que a la gente le gusta ver. Sin importar el resultado, Carlos siempre brinda espectáculo y da batalla hasta el final. Aquel 27 de agosto Condit lanzó un solo golpe antes de ser sometido por Demian Maia en menos de dos minutos.
“Me sentía muy decepcionado. Soy una persona competitiva y obviamente me quedé corto, y ante mis ojos, de una manera patética, porque incluso en peleas que he perdido, he salido a dejarlo todo y brindado un gran espectáculo. En esa pelea no pude hacerlo y eso hizo que me doliera más.”
Condit asegura que no hubo un momento en particular que lo hiciera decidir que era momento de regresar. Fue simplemente cuestión de volver poco a poco al entrenamiento hasta sentirse nuevamente en casa. Además de que todavía no puede darse el lujo de retirarse, debido a sus compromisos financieros.
“Hay muchos factores, sigo amando pelear, amo entrenar, el proceso, la gente de la que me he rodeado y a todo mi equipo, pero honestamente también hay un aspecto financiero. Esta es mi profesión, esto es lo que hago. No fui a la universidad, no tengo muchas opciones como plan B. Tengo cuentas que pagar y bocas que alimentar, así que hay que ponerse los guantes y ponerse a trabajar.”