El octágono de UFC hace el viaje a la lejana tierra de Auckland, Nueva Zelanda para UFC Fight Night 110. El evento principal promete un combate de alarido entre dos de los más peligrosos noqueadores de peso completo. Nos referimos por supuesto a Mark Hunt y Derrick Lewis. ‘The Super Samoan’ tiene 9 victorias por la vía del cloroformo, mientras ‘The Black Beast’ suma 16 KOs en sus 18 victorias como profesional.
Con semejantes números parece garantizado que esta pelea de gran tonelaje no llegará a las tarjetas de los jueces. Hunt intentará que la victoria se quede en casa y volver a la senda del triunfo tras ser derrotado por Alistair Overeem. Lewis buscará extender su racha a siete victorias consecutivas esperando acercarse a una pelea titular.
El pesaje oficial se llevó a cabo este viernes por la mañana en Nueva Zelanda. La jornada transcurrió sin mayores sobresaltos, la gran mayoría de los combatientes venció a la romana sin problemas. El único traspié fue el de la coreana Chan-Mi Jeon que no pudo dar el peso y será multada con el 20% de sus ganancias, mismas que irán a las arcas de su oponente, J.J. Aldrich.
La nota divertida del pesaje la dio Derrick Lewis, quien como ya es costumbre sacó a relucir su lado irreverente que gusta de mofarse de otros peleadores. En esta ocasión Lewis recreó el sonado incidente de la toalla de Daniel Cormier y le arrancó carcajadas a más de uno de los reporteros presentes.
Lewis apareció acompañado de un par de personas que venían sujetando la famosa toalla blanca de UFC. Se hizo un silencio expectante mientras el peleador subía a la báscula. Sin mostrar emoción alguna, Derrick subió a la báscula y de inmediato sujetó la toalla por unos instantes. El silencio se tornó en carcajadas cuando Lewis bajó la toalla con sus manos y mostró que estaba vestido y solo se estaba burlando de Daniel Cormier.
