Tras algunas semanas de deliberación, la Agencia Anti Dopaje de Estados Unidos (USADA, por sus siglas en inglés) anunció la suspensión para T.J. Dillashaw.
El ex campeón de peso gallo de UFC estará fuera de la jaula por espacio de dos años. Dillashaw aceptó la suspensión retroactiva a partir del 18 de enero de 2019. Las noticias corrieron como reguero de pólvora cuando el propio Dillashaw anunció que dejaba vacante el título de las 135 libras. En ese momento T.J. se limitó a decir que USADA había encontrado un “hallazgo adverso” y que esperaba poder aclarar.
Este martes 9 de abril la propia agencia emitió un comunicado oficial para anunciar lo sucedido con Dillashaw. USADA informó que Tyler Jeffrey Dillashaw dio positivo por eritropoyetina humana recombinante (rHuEPO). El hallazgo se dio en una prueba de orina tomada a Dillashaw el pasado 18 de enero. Es decir, en la prueba realizada un día antes de que enfrentara a Henry Cejudo por el título mosca de UFC.
La eritropoyetina humana recombinante se describe en el comunicado como una hormona sintética usada para estimular la producción de glóbulos rojos en el cuerpo. Incrementando así el transporte de oxígeno, y el poder aeróbico. Sobra decir que es una sustancia que evidentemente repercute en el desempeño de un peleador profesional.
El comunicado reitera que la sanción es retroactiva; Dillashaw podrá volver a pelear el 18 de enero del 2021. El ejecutivo de USADA Travis T. Tygart cerró el comunicado con unas palabras.
“Todos sabemos que las presiones por ganar en cualquier nivel de los deportes son reales e intensas. Por ello, los duros esfuerzos antidopaje son tan necesarios para proteger los derechos, salud y seguridad de los atletas limpios. Además de para asegurar que aquellos que sucumban ante las presiones y decidan romper las reglas serán responsabilizados de manera real y significativa, como fue en este caso.”
