La campeona de peso pluma de UFC Cris “Cyborg” deseaba pelear contra una “verdadera” retadora de 145 libras. Sin embargo no será en su próxima defensa del título. La brasileña anunció en la semana que había aceptado pelear contra su compatriota Amanda Nunes en UFC 226.
“He aceptado pelear con Amanda Nunes el 7 de julio en Las Vegas como parte de UFC 226 en la semana internacional de UFC.”
“Ahora estoy esperando que mi manager trabaje con UFC acerca del combate para que podamos hacer Cyborg vs Nunes. ‘La súper pelea’ #CyborgNation, nosotros contra ellos.”
Cyborg ganó el campeonato de peso gallo en UFC tras derrotar a la ex campeona de Invicta Tonya Evinger en UFC 214 en julio del año pasado. Cyborg defendió su cinturón en contra de la ex campeona pluma Holly Holm, quien también fue campeona mundial en boxeo.
Después de la victoria ante Holm, Cyborg dijo que quería enfrentar a una contendiente número 1 natural de las 145 libras para seguir construyendo la división.
“Habiéndome re-establecido como campeona mundial en las 145 libras, siento que mi obligación es pelear contra la contendiente número 1 en las 145 libras para mi siguiente pelea.”
“He peleado 4 veces consecutivas contra chicas que suben desde las 135 libras para pelear contra mí. Solo porque eran ‘Súper Peleas’ para los fanáticos.”
A pesar de las objeciones de Cyborg, el presidente de UFC Dana White continuó su campaña, diciéndole a todos que él estaba completamente comprometido en hacer la pelea entre Cyborg y Nunes. Afirmó que ese sería el siguiente combate de campeonato en la división pluma. Agregó además que Nunes ha peleado varias veces en las 145 libras durante su carrera.
Aunque suena como si todavía no hubiera contratos, Nunes ya había estado presionando para la pelea. Ahora que Cyborg ha aceptado verbalmente, es más que probable que suceda. Amanda asegura que no es nada personal, Cyborg quizás piense algo distinto tras los duelos verbales con el entrenador de Nunes.
Si Nunes gana la pelea, ella se convertiría en la primer mujer campeona de UFC en tener títulos en dos divisiones.